La facturación de los establecimientos del área industrial cae un 50% por la crisis sanitaria – Los colectivos piden ampliar los ERTE hasta marzo

La crisis sanitaria del coronavirus está pasando factura al sector de la hostelería en Elche. En este sentido, el Colectivo de Hostelería de Elche y la Asociación de Empresas de Servicios de Elche y Comarca (Aesec) advirtieron ayer que si la situación es «insostenible» en el casco urbano, aún lo está siendo peor en zonas como la del Parque Empresarial, donde aseguraron que este fin de semana echarán el cierre dos establecimientos que no pueden aguantar más, mientras que el resto seguirán pese a facturar un 50% menos que hace un año.

Los cambios de hábitos de los trabajadores que acuden a diario al enclave empresarial, que desde que se declaró la pandemia frecuentan menos los establecimientos de hostelería para evitar contactos con otras personas, afectan negativamente a los negocios enfocados a ofrecer servicios de restauración en el polígono de Torrellano.

La vicepresidenta del colectivo de Hostelería de Elche, Paqui Solves, dijo que «las cifras son muy negativas, y si seguimos así de aquí a final de año estimamos que el 40% de los negocios tendrán que acogerse a ERE para reducir las plantillas despidiendo a una parte importante del personal». Para evitar esta situación reclaman que los ERTE se amplíen hasta marzo.

Es por este motivo, por el que el presidente de Aesec, Antonio Andreu, dijo que «el sector necesita ayudas». El presidente de Aesec indicó que «podemos entender las medidas que se han adoptado para hacer frente a la crisis sanitarias, pero también entendemos que deben ir acompañadas de ayudas para los sectores que las están soportando, como es el caso de la hostelería o el ocio nocturno que ha tenido que cerrar».

«Debemos limpiar la imagen de la hostelería», insistían desde el sector ilicitano, donde aseguraban que «la mayoría de los brotes que se están registrando son en el ámbito familiar, y no en el sector de la hostelería donde adoptamos todas las medidas para garantizar la seguridad de los clientes».

La situación en los negocios de la ciudad también es mala. Concretamente los colectivos estiman que las caídas de la facturación en la ciudad es superior al 35% en función del tipo de establecimiento aunque recuerdan que los locales de ocio nocturno llevan cerrados varias semanas, por lo que urgen medidas para apoyar a los negocios del sector antes de que «tengamos que enfrentarnos a miles de despidos».

Una de las preocupaciones que expresaron ayer los empresarios del sector de la hostelería ilicitana es cómo se va a afrontar la próxima campaña de Navidad. Paqui Solves pidió que «se amplíen los grupos mínimos para poder dar servicio a nuestros clientes, ya que de lo contrario iremos a la ruina».

Para que las reivindicaciones del sector ilicitano se escuchen en todas partes, el Colectivo de Hostelería de Elche se ha sumado a la nueva federación del sector que se está gestando a nivel nacional, a través de Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Alicante (APEA). «Queremos que nuestra voz llegue a donde haga falta, y por eso ya formamos parte de la nueva federación nacional».

Además, anunciaron que el sector está trabajando codo con codo con la Concejalía de Comercio para llevar a cabo acciones promocionales que incentiven el consumo tanto en el comercio tradicional como en la hostelería. Paqui Solves explicó que «tenemos que aprovechar cuando se abra la nueva Plaça de Baix y se estrene la peatonalización para reactivar el sector y devolver vida al centro que ahora está muerto». Quejas

Por otro lado, los hosteleros ilicitanos mostraban su malestar por el retraso en el cobro de las ayudas al alquiler que sacó el Ayuntamiento de Elche. «Necesitamos que el dinero llegue lo antes posible», indicó Paqui Solves, que también mostró su malestar por el hecho de que las ayudas que ha dado el Ayuntamiento de Elche a los empresarios «sean incompatibles con las que se han lanzado desde la Generalitat Valenciana».