Estamos en una situación de estado de alarma. Las autoridades nos han pedido que nos quedemos en casa salvo en casos excepcionales. Esto puede afectar al estado de ánimo de muchas personas que sienten cierto desasosiego, estrés y ansiedad, además de una sensación de vulnerabilidad al escuchar tantas informaciones y medidas como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
Quedarse en casa no tiene por qué ser una tortura. Es momento de parar, ordenar ideas, leer, cocinar, ordenar la casa… La lista de actividades de lo que podemos hacer es inmensamente larga.
Nos vemos el 27 de marzo en el webinar con Alexandra Martínez Alenda.